A la hora de alquilar pueden surgir riesgos, por lo que los propietarios utilizan una serie de herramientas (seguro de impago de alquiler, depósitos de garantía o aval bancario) para garantizar el pago de las mensualidades de renta.
El mercado inmobiliario siempre está en continuo cambio. Durante los últimos años, se ha visto un incremento del alquiler de la vivienda frente a la compra tradicional en muchos países. Al igual que el mercado inmobiliario ha evolucionado, también lo han hecho las herramientas que aseguran un alquiler seguro donde, si hay algún problema con los inquilinos, se pueda solucionar de la mejor forma posible.
Desde Grupo Mutua Propietarios explicamos cuáles son las diferencias entre un seguro de impago de alquiler y un aval bancario, y te detallamos las ventajas del seguro de impago de alquiler frente al aval bancario a la hora de proteger tu inmueble. Además, te contaremos cómo funciona nuestro seguro de impago de alquiler. Así podrás elegir la opción que creas más conveniente cuando alquiles tu vivienda.
Seguro de impago de alquiler
El seguro de impago de alquiler protege a los propietarios en caso de que el inquilino deje de pagar el alquiler, pero, además, también protege al propietario en caso de que los inquilinos dejen desperfectos en la vivienda, entre otras ventajas.
Estas son las coberturas principales de nuestro seguro de impago de alquiler:
- Impago de alquiler, tanto de rentas como de suministros
- Pérdida del alquiler en caso de incendio
- Defensa jurídica del propietario
- Actos vandálicos o apropiación indebida del continente
- Sustitución de cerradura
Además, existen garantías adicionales que pueden ser interesantes para el arrendador, como las garantías de actos vandálicos sobre el contenido, el impago de suministros o la asistencia en el hogar (por ejemplo, la limpieza de vivienda por cambio de inquilino).
Es por ello que el seguro de alquiler es la mejor manera para el propietario de protegerse de los riesgos de alquilar una vivienda, aunque existan otros mecanismos como el aval bancario.
¿Qué es un aval bancario en un alquiler y cómo funciona?
El aval bancario en un alquiler es una garantía económica que funciona como una respuesta económica ante una obligación no cumplida por el inquilino, en este caso, el pago de la renta. Es decir, el aval bancario funciona de manera similar al seguro de alquiler, solo que en un aval bancario es la entidad bancaria (el avalista) quien se encargará del pago de la renta en caso de impago.
En este caso, y a diferencia del seguro de impago de alquiler, que es contratado por el propietario, es el inquilino quien debe solicitar el aval a la entidad bancaria. Las condiciones variarán según la entidad, querealizará un estudio de viabilidad para saber si esa persona cuenta con los requisitos requeridos para solicitarlo. Además, el aval bancario también conlleva un coste que deberá asumir el inquilino.
Ventajas del seguro de impago de alquiler de Grupo Mutua de Propietarios
El seguro de impago de alquiler de Grupo Mutua Propietarios protege tu vivienda alquilada. Nos encargamos de recuperar tu vivienda en caso de impago, de que cobres por las rentas impagadas y te protegemos frente a los desperfectos y daños en el inmueble. Puedes contratar nuestro seguro sin tener que pedir al inquilino la documentación económica. Gracias a nuestro sistema propio de scoring digital, podemos analizar la viabilidad del inquilino en menos de dos minutos, para ayudarte a seleccionar el inquilino más adecuado.
Desde Grupo Mutua Propietarios te recomendamos contar con un seguro de alquiler de vivienda ya que es la herramienta más completa. ¿Estás interesado en nuestros seguros? Ponte en contacto con nosotros.