Sufrir un robo en tu propia vivienda es una de las peores situaciones a las que te puedes enfrentar, por lo que recurrir a medidas de seguridad es una decisión acertada en cualquier hogar. Existen numerosas soluciones para adaptar la seguridad a las necesidades de cada vivienda, y en Mutua de Propietarios queremos ayudaros a escoger las que mejor se adapten a vuestra casa, ¡atentos!
- La puerta de entrada es uno de los puntos más relevantes de la vivienda, y es fundamental protegerla de forma adecuada. A la hora de escoger puertas de seguridad es posible decantarse por una puerta acorazada o blindada, mientras que las puertas blindadas son de madera, las acorazadas con de acero, por lo que, aunque ambas refuerzan la seguridad de la vivienda, las acorazadas son más resistentes. De forma adicional, se pueden añadir cerrojos o cerraduras para reforzar.
- Las ventanas son otro punto de la vivienda al que hay que prestar especial atención, de forma más significativa si se trata de un chalet, un bajo o un primero, ya que el acceso desde la calle resulta muy sencillo. Para proteger las ventanas se puede recurrir a la instalación de rejas o cierres reforzados, pero lo más recomendable es contar con un sistema de alarma antirobos que detecte cualquier movimiento extraño.
- Los sistemas de alarmas son una de las opciones más comunes para proteger una vivienda. A través de estos sistemas es posible detectar cualquier intrusión o movimiento en la casa, sin embargo, es importante evitar errores en el uso de estos aparatos. A la hora de instalar el dispositivo de la alarma, es importante que el teclado en el que se introduce el código de desbloqueo no se pueda ver desde el exterior de la vivienda, a través de puertas o ventanas.
- La videovigilancia también resulta especialmente útil en las zonas de entrada o exterior, o en las viviendas con varias plantas. Existen sistemas de videovigilancia muy precisos que permiten un control absoluto de todas las zonas de la vivienda desde el smartphone. Durante la noche, las zonas de exterior o las plantas bajas de las viviendas suelen estar más desprotegidas, por lo que es fundamental establecer sistemas de vigilancia.