El verano se acaba y, aunque el regreso de las vacaciones siempre es complicado, es hora de ir adaptándose a la rutina. ¿Por qué no empezar por la piscina? Aprovecha los últimos días de sol y prepara tu piscina para la llegada del invierno. Desde Mutua de Propietarios te damos algunos consejos para su mantenimiento y cuidado en los días de frío, ¡guarda los flotadores y pon la piscina a punto para la próxima temporada!
Lo primero que hay que valorar es cómo quieres dejar la piscina: vacía o mantenerla con agua. Las dos opciones ofrecen una serie de ventajas y desventajas que dependerán de tus necesidades o preferencias:
- Vaciar la piscina: es la mejor opción para limpiar y desinfectar a fondo, además, te permite ver con mayor facilidad si hay desperfectos o grietas. Para vaciarla puedes hacerlo mediante el desagüe de la piscina o la bomba de filtro. No obstante, el vaciado completo supone un gasto excesivo de agua al tener que llenarla de nuevo con la llegada del buen tiempo.
- Mantenerla con agua: en este caso, el nivel de agua debe mantenerse por debajo de las bocas de succión de la piscina. Deberás limpiar bien los filtros, el fondo y las paredes, es importante mantener el agua limpia durante todo el invierno para evitar que se descomponga. Sin embargo, no será necesario que eches la misma cantidad de cloro y ni que la depuradora funcione durante el mismo tiempo.
En cualquier caso, decidas lo que decidas, hay una serie elementos que debes tener en cuenta para que tu piscina esté bien cuidada y puedas usarla sin problema el verano que viene:
- A pesar de que parezca una obviedad, es necesario mantener el agua en buen estado. Existen gran cantidad de productos químicos, pero es recomendable que acudas a un comercio especializado que te aconsejará en función de la piscina, el tiempo que quieras usarla, etc. Como se comentaba anteriormente, reduce el agua (da igual que sea de cloro o sal) y pon objetos flotantes para evitar que el hielo presione las paredes si la piscina llegara a congelarse.
- Protégela con un cobertor. Si quieres evitar que la piscina recoja demasiada suciedad, como hojas, arena, ramas…, puede optar por cubrirla con una lona de poliéster y PVC que la aísle del exterior. Además, de esta manera reducirás el gasto en productos químicos.
- ¿Y si la aprovechas también en invierno? Puedas darle un nuevo uso y sacar partido de tu piscina también en los días más fríos. Mediante cubiertas (térmicas, por ejemplo), que aumentan la temperatura del agua, o calentadores para el agua, tu piscina de verano puede convertirse en climatizada para la temporada invernal.