El control del consumo de agua en comunidad no sólo implica un gran ahorro económico, el beneficio también repercute en la salud medioambiental. Aunque el consumo de agua debe regularse durante todo el año, hay que tomar mayores precauciones con la llegada del calor y los tiempos de sequía. Desde Mutua de Propietarios, especialistas en seguros de comunidades, te damos algunos consejos prácticos para que tu comunidad reduzca gastos y esté más comprometida con el entorno:
- Realiza la limpieza de las zonas comunes con agua reciclada: por ejemplo, con agua usada para la limpieza del hogar o, si en tu comunidad hay piscina, con el agua que se vaya a renovar a final de la temporada.
- Si hay zonas verdes, atención al riego. Las zonas ajardinadas suponen un considerable gasto de agua para la comunidad. Es recomendable utilizar elementos ornamentales como piedras, cortezas de árbol, grava o especies autóctonas más resistentes a los periodos de sequía. De esta manera, sólo necesitarás una pequeña aportación de agua que puede hacerse a través del riego localizado por goteo.
- Cuidado en el mantenimiento de la piscina comunitaria. Si el agua se mantiene limpia en el día a día no habrá que vaciar la piscina durante mucho tiempo. Especialistas del sector recomiendan cubrir la piscina en los meses que no se utiliza, sin vaciarla, y usar un sistema de depuración cada 10 días para mantener el agua varios años.
- Muchos propietarios aprovechan el acceso a mangueras para lavar el coche u otros elementos de uso personal. De ser así, utiliza un cubo y evita el uso continuado de la manguera. Por otro lado, usa aspiradoras para recoger hojas, cepillos y escobas para la limpieza de zonas comunes.
- Además, es importante realizar mantenimientos periódicos del sistema hidráulico de las zonas comunes para comprobar y reparar fugas.