La llegada de Internet y el correo electrónico supusieron una importante descarga de trabajo burocrático para los más de 15.000 profesionales del sector de la Administración de Fincas colegiados en España, quienes pasan aproximadamente un 60% del tiempo de oficina gestionando llamadas de propietarios y dedicados a tareas de contabilidad.
Teniendo en cuenta esto, los programas de gestión han ayudado en gran medida a mejorar la calidad de vida de los administradores de fincas, en especial los agregadores financieros. Por ejemplo, hasta hace no demasiado tiempo, el administrador tenía que entrar en la página web de cada banco e introducir una por una las credenciales de cada comunidad para acceder a las cuentas. Hoy en día, gracias a estos programas, es posible descargarse los movimientos de todas las comunidades sea cual sea su banco.
Lo mismo ocurre con los agregadores de facturas, que permiten descargar y almacenar en el ordenador los datos de los grandes proveedores. De esta forma, en pocos años, se ha pasado de recibir las facturas de los proveedores por correo postal o pasar por cada casa para cobrar las cuotas, a tener toda la tecnología disponible para poder realizar una gestión online lo más efectiva posible.
La verdadera aportación, por tanto, que los agregadores financieros han supuesto para los administradores de Fincas, es el tiempo que se ahorran en sus gestiones diarias más mecánicas, ya que ahora bastan 5 minutos para sincronizar la contabilidad con el banco y realizar otro tipo de movimientos con un solo clic. Así, los administradores de fincas pueden atender las gestiones más urgentes de las comunidades y, lo que es más importante, mejorar su estrategia para ampliar la cartera de clientes.
Las herramientas tecnológicas se convierten en las mejores aliadas para los administradores de fincas, ayudándoles a automatizar algunos de sus procesos y a generar, presentar y analizar la información. Pudiendo así, proporcionar un valor añadido, ser proactivo y ahorrar tiempo y dinero, características de un administrador de fincas que los vecinos de una comunidad tanto valoran.