¿Cómo ves el problema de la falta de capacidad aseguradora para determinadas
tipologías de riesgos industriales?
Un auténtico problema económico y social, principalmente para aquellas empresas
cuyos riesgos puedan quedar desprotegidos, pero también para la sociedad en general
por el efecto dominó que provocaría la ocurrencia de siniestros de magnitud, cierres de
empresas, despidos, daños a terceros, deudas con proveedores, etc…
El sector asegurador daña su imagen reputacional al incumplir su función de protección
social y no aportar soluciones inmediatas para la cobertura de determinados riesgos,
ante situaciones de esta magnitud el sector debería ser capaz de organizar soluciones
como en ciertos riesgos mediante pools, no olvidemos que la función del sector es clave
para estabilizar la economía de los países.
Es una evidencia la oleada de concentración que ha recorrido la mediación en
España, ¿cuáles son, en tu opinión, las fuentes principales de valor para el
comprador, en estas operaciones?
En la estrategia del comprador este definirá que valor de retorno espera de cada
adquisición, volumen y crecimiento inorgánico, rentabilidad, posición en sectores
concretos por especialización o diversificación, cada operación tendrá su justificación.
No obstante, también observo otro dato, el constante aumento interanual de
Mediadores Profesionales registrados en sus distintas figuras, especialmente
corredores de seguros, puede que este dato distorsione o contradiga esa aparente
concentración generalizada, al menos es indicador de la proyección de la mediación.
¿Cómo ves la evolución del desarrollo de los distintos canales de distribución dentro
de la mediación, tradicional, internet, bancaseguros?
Personalmente entiendo que cada canal tiene su “parroquia” y debería ser el
consumidor quien eligiera al tipo de distribuidor que les gestione sus seguros conforme
a sus propios intereses, esto otorgaría igualdad de oportunidades a todos los canales;
por desgracia esto no es así, al existir un modelo de distribución basado en la
condicionalidad a otros productos y que, aunque con frecuencia sufre sentencias
condenatorias por prácticas abusivas, sigue ejerciendo con el mismo “modus operandi”.
En cualquier caso, el consumidor actual está más informado, demanda atención
personalizada, productos de seguro adaptados a sus necesidades y agilidad en la
resolución de incidencias / siniestros, en la era de la omnicanalidad esto debería
ofrecerlo cualquier tipo de mediador, el canal más alineado con el cliente será el que más
positivamente evolucione y creo firmemente que la “mediación tradicional” está más
preparada y valorada por el consumidor.
No veo cambios generalizados en el desarrollo de los diversos canales, o dicho de otro
modo, todos los canales tienen bastante facilidad de adaptación al cambio constante;
así lo demostró la estabilidad de las plantillas de empleados de toda la mediación
durante los años afectados por la pandemia.
¿Cuáles son los principales retos y amenazas a que se enfrenta la mediación, en tu
opinión?
Para mí, el reto y amenaza a partes iguales es la Pérdida de Identidad en un sentido
amplio; la mediación de seguros como sector no puede reducirse a ser un mero
comercializador de seguros,siendo este es un modelo posible y rentable (más propio de
la industria aseguradora); a medio y largo plazo tanto el profesional como la empresa
de mediación, ha de ofrecer al consumidor de seguros lo que este demanda,
asesoramiento, acompañamiento, accesibilidad y personalización, obteniendo su
confianza y como resultado la estabilidad y rentabilidad de su cartera de clientes.
Todo lo demás forma parte de la adaptación al cambio que mencionaba antes, retos
tecnológicos, nuevas figuras de distribución, etc… quizás peque de optimista, pero me
gusta poner el foco en las oportunidades más que en las amenazas.
¿Cómo describirías, que caracteriza, la evolución de los clientes en los últimos años y
cómo prevés que cambien a futuro?
En un aspecto muy general, veo que todos hemos introducido y normalizado el uso de
las herramientas digitales, agilizando procesos y ahorrando tiempos, aunque, para el
momento importante seguimos demandando el trato personal, a través de la tecnología
sí, pero con el valor de la personalización, este proceso nos ha acompañado durante los
últimos años.
El futuro me gustaría verlo como una evolución lógica del presente, ya veremos.